Iglesia de Santa Teresa de Jesús

Periodo

1951–1975

Relación con la carretera

Visible desde la carretera

Estado actual

Original

Estado de conservación

Bueno

Accesibilidad

• Dificultad de acceso: Bajo
• Visita: Según horario

Descripciones

• 1
• 2

• Este conjunto parroquial situado en La Cala de Mijas, en el ámbito costero del municipio responde a la demanda de equipamiento asistencial para los nuevos desarrollos turísticos de los setenta, coincidiendo con la etapa posconciliar, por lo que su concepción como espacio único, aunque de aspecto fragmentario por lo movido de su perímetro, lo hace propicio para la disposición asamblearia y participativa con la que el Concilio Vaticano II promulga la renovación de los actos litúrgicos. La adaptación de la forma a estas cuestiones se pone de manifiesto en una planta cuadrada en la que desaparece una de las esquinas para disponer de una doble entrada que, curiosamente no sigue el eje focalizado hacia el altar situado en el ángulo opuesto.

  El tratamiento rugoso, tanto interior como exterior, de los paramentos blancos se complementa con sutiles entradas de luz indirecta por los laterales en forma curva y también de forma cenital entre los pliegues de la lámina de hormigón, contribuyendo así a reforzar la direccionalidad axial de la planta.

  Fuente: De Lacour Jiménez, Rafael, "Iglesia de Santa Teresa de Jesús, Mijas, Málaga", Registro Andaluz de Arquitectura Contemporánea, Archivo del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico. Base de datos Patrimonio Inmueble de Andalucía, 2007

• Esta edificación, situada en La Cala de Mijas, surge de las nuevas necesidades de equipamiento ligadas al desarrollo turístico. Se trata de un proyecto singular, tanto por el encargo en sí como por la forma que tuvo su autor de abordarlo. Así, recogiendo las nuevas corrientes litúrgicas derivadas del entonces reciente Concilio Vaticano II, se proyecta un edificio de una sola nave con una planta fuertemente focalizada hacia el espacio de culto, que queda además abrazada por los fieles, y subraya la idea de "culto comunitario".

  De esta forma, la planta, un cuadrado "orgánico" al que se le ha hurtado una esquina, tiene una lectura unitaria fuertemente conceptualizada. Los huecos, por los que entra la luz de forma sesgada, se sitúan en los pliegues que va formando el cerramiento, el cual, de una forma casi textil, abraza la planta sin solución de continuidad: apenas las dos entradas principales rompen esta aparente continuidad. Precisamente resulta sorprendente esta doble entrada que obvia el eje diagonal, tan definitorio del espacio interior.

  Estructuralmente, el edificio se resuelve mediante un alámina suspendida de hormigón armado que configura la cubierta y que se apoya sobre unos cuantos y escasos pilares, separándose del muro perimétrico. Por otra parte, el programa resuelve rodos los requerimientos de la liturgia católica: altar, presbiterio, nave, "capillas laterales", baptisterio y atrio encuentran su lugar en este particular proyecto.

  Fuente: VV.AA. La Arquitectura del sol_Sunland architecture. Barcelona: Colegios Oficiales de Arquitectos de Cataluña, Comunidad Valenciana, Islas Baleares, Murcia, Almería, Granada, Málaga y Canarias, 2002, p. 295.