Torre Quebrada

Periodo

Anterior a la carretera

Relación con la carretera

Punto de observación del corredor

Estado actual

Rehabilitado

Estado de conservación

Bueno

Protección

• BIC monumento (inscrito BOE 29/06/1985).

Accesibilidad

• Dificultad de acceso: Bajo
• Visita: Continua

Descripciones

• 1
• 2
• 3
• 4

• Torre Quebrada forma parte del sistema defensivo de torres vigía medieval-islámico que deja memoria histórica de la condición de límite de este corredor litoral del sur de Europa, muy cerca del Estrecho de Gibraltar y a pocos kilómetros del continente africano. En contraste con elementos de defensa en enclaves concretos, estas torres no se diseñaron aisladas como puede parecer en la actualidad, sino como una auténtica red de lógica territorial, capaz de transmitir señales de alerta no sólo a lo largo de la costa sino sobre todo hacia el interior, aprovechando para ello la transversalidad que le confiere su estructura de ríos y arroyos, vías de penetración de su compleja y diversa topografía. Los Reyes Católicos decidieron seguir utilizándolo una vez reconquistado el territorio a finales del siglo XVI. Carlos III en el siglo XVIII mejoraría el sistema, construyendo más torres y rehabilitando las preexistentes.

  La inserción contemporánea de la carretera y su trazado ha motivado la prevalencia de una red longitudinal principal frente a la radialidad histórica de la red defensiva. La diversidad natural del soporte costero explica la situación en la que han quedado las torres con respecto a la carretera: Torre Quebrada se sitúa en un tramo de topografía abrupta, donde alternan playas con salientes acantilados, siendo éste el punto más estratégico de la costa entre Torremolinos y Fuengirola, explicando la localización de esta torre. Supuso así mismo el punto más crítico de la N-340 en este tramo, cuyo trazado a media ladera ha determinado que ésta se sitúe entre la torre y el litoral. La urbanización del entorno de la carretera se construye aprovechando estas condiciones, quedando la torre aislada entre complejos hoteleros y residenciales, impidiendo vislumbrar su pertenencia a un sistema. Su topografía ha protegido el entorno más próximo de la torre, rehabilitada en la actualidad, permitiendo aún que podamos disfrutar de unas vistas privilegiadas desde ella así como observarla desde la carretera, emergiendo de este enclave marcado por las estribaciones de la Sierra de Mijas, en el que aún sobrevive una vegetación propia.

  Fuente: Loren-Méndez, Mar. Torrequebrada, Benalmádena, Málaga. Proyecto de investigación El corredor de la carretera N-340 como eje histórico del litoral andaluz: metodologías de caracterización y estrategias para su patrimonialización y regeneración sostenible

• 87. Torre Atalaya Quebrada.

  Fortificación existente en el mando de Mijas, municipio de Benalmádena.

  Aún no había concluido la toma de Granada cuando en 1490 Fernando de Nuncibay, encargado por los Reyes Católicos de colocar las guardas de Málaga, estableció dos peones en Torre Quebrada, de lo que se deduce su origen islámico.

  En la Instrucción de 1497 Torre Quebrada formaba parte del término de Málaga, contando con dos guardas.

  Aparece con la misma dotación de dos guardas en la Provisión de 1501, situada entre el Muelle de Benalmádana y la Torre de Molinos.

  Sin embargo debió de arruinarse, pues según documento de 27-9-1504 citado por Temboury se remató su reconstrucción en el albañil Cristóbal de la Parra. En 1567 se orden construirl ade nuevo a Pedro de la Chica, albañil de Granada, con las siguientes condiciones: 20 pies de diámetro (5,60 metros) y 8 varas y 2 pies de altura (7,23 metros), el cuerpo inferior macizo, de 6 varas (5 metros), los huecos con pilares y arco de ladrillo; los muros exteriores de un pie (0,28 metros) y en ellos adosada la subida al terrado, que contaba con parapetos de 5/4 de alto rematados a sardinel, un caño de desagüe y canes de piedra o madera para sostener ladrones sobre los huecos; quedaría revocada por fuera y por dentro.

  En la visita realizada en 1571 por Antonio de Berrio y Luis Machuca señalan que la torre era nueva, por lo que no necesitaba reparo alguno; contaba con una dotación de dos guardas, aconsejando añadirle uno más.

  En la visita realizada por Bartolomé Amphoux en 1726 señaló que Torre Quebrada necesitaba un syelo de hormigón, una escalera, una porción de parapeto, revocarla por dentro y por fuera y una puerta de madera, presupuestando dichos reparos en 900 reales de vellón.

  En la relación de la visita realizada en 1739 por el Marqués de Valdecañas figura la Torre Quebrada a Levante de la del Muelle y a Poniente de Torre Bermeja, sin hacer referencia a su estado.

  Según informe redactado en 1749 por Jerónimo Amici la Torre Quebrada necesitaba algunos reparos que presupuestó en 30 reales de vellón y 24 maravedís.

  Según la relación sin firma de 1759 la Torre Quebrada necesitaba hacer un lugar común, componer la chimenea, la plaza de armas y otros reparos que fueron presupuestados en 150 reales de vellón.

  En 1762 Antonio María Bucarelli indicó que Torre Quebrada estaba en mediano estado y podía tener dos cañones de a 4 libras.

  En el estado de las torres realizado en Málaga el 15-11-1763 por Juan de Urbina Torre Quebrada tenía dos torreros y 6 fanegas de secano.

  En el Reglamento de 1764 figura Torre Quebrada, en el partido de Mijas, con un cabo y tres torreros.

  En la relación de 1765 Esteban Aymerick anotó que la Torre Quebrada podía tener un cañón de a 4 libras, pero necesitaba construirle una sobrebóveda y un lugar común, junto a otros reparos que presupuestó en 1700 reales de vellón.

  En el Plan General de Obras de 1767 José de Crame indicó que la Torre Quebrada sólo podía admitir un cañón de a 4 libras de los dos de su dotación, pero necesitaba redoblar su bóveda, recalzos y repellos que presupuestó en 600 reales de vellón.

  En el informe redactado por Ramón de Nabas el 26-12-1773 se indicó que la Torre Quebrada se hallaba muy deteriorada y para ponerla en estado de admitir los dos cañones de su dotación serían necesarios 4000 reales de vellón.

  En la relación redactada en Málaga el 18-8-1774 Francisco Gozar anotó que la Torre Quebrada había sido dotada con dos cañones de a 4 libras y debían de hacerse diversos reparos para dejarla en servicio.

  En el informe realizado en Málaga el 12-12-1781 por el citado Gozar señaló que Torre Quebrada se hallaba en buen uso.

  En la relación realizada en 1783 por Joaquín Villanova indicó que Torre Quebrada necesitaba 30 reales de vellón para una cerradura.

  En el derrotero de 1787 figura Torre Quebrada sobre una punta saliente, que es el fin de la Ensenada de Fuengirola.

  En el informe de 1803 Felipe de Paz anotó que Torre Quebrada era cilíndrica de las antiguas, con altura de 12 a 13 varas, está colocada sobre un alto cabezo escarpado; su bóveda, con puerta alta y ladronera para su defensa, no podía admitir artillería.

  En el informe fechado en Granada el 31-1-1821 por Juan Pérez señaló que la Torre Atalaya Quebrada se hallaba en buen estado.

  En la relación de 1830 Mauricio Rodríguez de Berlanga anotó que la Torre vigía Quebrada era de figura circular, con dotación de un cabo y tres torreros.

  En 1849 Miguel de Santillana indicó que era circular y se hallaba deteriorada, aconsejando su reposición; sus torreros disfrutaban de 12 fanegas de tierra y de una choza a 90 pies de la misma.

  En la memoria de 1857 José Herrera García indicó que la Torre vigía Quebrada tenía figura cilíndrica de 25 varas de desarrollo, se encontraba en mal estado y necesitada de grandes reparos, fue incluida en el proyecto de estaciones telegráficas.

  En los derroteros de 1860, 1873, 1906 y 1945 Torre Quebrada figura sobre una punta de piedras.

  Torre Quebrada se conserva rodeada de urbanizaciones para cuya construcción se han escarpado sus laderas hasta dejarla como un islote de difícil acceso entre las nuevas urbanizaciones.

  Fuente: Gil Albarracín, Antonio. Documentos sobre la defensa de la costa del Reino de Granada (1497-1857). Almería: Grilselda Bonet Girabet, 2004, p. 500-502.

• Está situada sobre una elevación escarpada no lejos de la línea de costa. Su entorno no está urbanizado actualmente, no presentando obstáculo alguno para su visión.
  Es de forma troncocónica con un perímetro aproximado de 17,60 metros y una altura superior a los 9 metros. Presenta un cuerpo inferior macizo y una cámara muy deteriorada, cuyo acceso en lado norte se sitúa a una altura superior a los 5 metros del suelo. La cámara presenta bóveda vaída de ladrillo. Esta habitación posee otra abertura, pequeña, en el lado sur medio cegada. A través de una escalera interior se accedía a la azotea, que se encontraba protegida con un pretil uniforme rematado a sardinel, aunque éste está incompleto . Asimismo ofrece huecos en los que se localizaban sus primitivos matacanes.
  Su obra es de mampostería, presentando el uso del ladrillo en el hueco de acceso y en la bóveda interior.
  Se conserva una saetera a unos 5 metros de altura, orientada al noroeste. Hacia el sur presenta otra un poco más alta, como a unos seis metros, que se encuentra medio cegada. El diámetro de base es aproximadamente de unos 5 metros y el del remate, a unos 8 metros de altura, se aproximará a unos 4 metros.
  El estudio del interior y azotea se ve impedido por su difícil acceso. En el interior de la cámara existiría una chimenea y un hueco de acceso a la azotea.

  Datos Históricos

  Esta torre aparece en la documentación antigua como herencia nazarí (S. XIII-XIV), pero su mal estado de conservación a principios del siglo XVI propició su reconstrucción. A mediados de este siglo seguía ruinosa por lo que se ordena, en 1.567, construirla de nuevo.

  Fuente: Base de datos del Patrimonio Inmueble de Andalucía (BDI). Torre Quebrada.

• Se halla al norte de la carretera, sobre un alto cabeza escarpado. Ha conservado su nombre primitivo, pues ya así se la denominaba en la Ordenazas de 1497; a ella se destinaban dos peones, con jornal diario de 25 maravedíes, uno para permanecer estable en la atalaya, y otro que había de hacer atajo hasta Torre Bermeja.

  En mal estado de conservación había de estar esta Torre Quebrada, pues en un documento de la Catedral (Leg. 61, núm. 6), del 27 de septiembre de 1504, dice que se remató la obra de su reconstrucción por el albañil Cristóbal de la Parra.

  Pero a mitad de siglo seguía ruinosa, por lo que se ordena en 1567 construirla de nuevo a Pedro de la Chica, albañil de Granada.

  Las condiciones de adjudicación de esta obra revelan las normas que eran características en la construcción; esta se proyecta con un diámetro de 20 pies (5,60 m.) y altura de 8 varas y dos pies (7,23 m.). el cuerpo inferior, macizo, tenía 6 varas (5 m.); a esta altura iban los huecos, con pilares y arco de ladrillos; el interior tenía un salita de 9 pies de diámetro (2,52 m.), cubierta a dos 2,5 varas (2,08 m.) por bóveda vaída de una rosca de ladrillo. Los muros exteriores eran de un pie (28 cm.)de grueso, y en ellos se adosaba una escalera de 98 cm., que daba subida al terrado; éste tenía parapetos de 5 cuartas de alto, rematados a sardinel; un caño de desagüe y canes, de piedra o madera, para sostener ladrones sobre los huecos. Por la azotea tenían salida los humos para señales d alarma, producidos desde una chimenea en la cámara; las condiciones de contrata agregaban que debía de quedar revocada interior y exteriormente.

  Las dimensiones y materiales coinciden con las exigidas en el pliego de las obras, lo que demuestra que ésta es la misma torre reconstruida por el albañil Pedro de la Chica en 1567. De semejantes proporciones, aunque menos esbelta, es la Torre Nueva, a la que otorgarle semejante filiación.

  Está construida con mampostería, de piedra negra; su forma es troncocónica, su entrada se ha cambiado de emplazamiento, y la ventana ha sido cegada.

  Domina esplendidos horizontes y su conservación es buena. Ahora se proyecta parcelar y urbanizar su zona.

  Fuente: Temboury Álvarez, Juan. Torres Almenaras (Costa occidental). Málaga: Diputación Provincial de Málaga, Instituto de Cultura, 1975.